La Energía del Futuro: ¿Qué es el Hidrógeno Verde?
La Energía del Futuro: ¿Qué es el Hidrógeno Verde?
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La Energía del Futuro: ¿Qué es el Hidrógeno Verde?

Te contamos todo sobre el hidrógeno verde, la energía cuyo consumo se espera que se multiplique para el 2030.

En la búsqueda por un futuro más sostenible, el papel del hidrógeno verde es un recurso clave que forma parte de la transición hacia fuentes de energía más respetuosas con el medio ambiente. Este gas tiene el potencial de sustituir gran parte de la demanda de gas natural, un hidrocarburo fósil que libera dióxido de carbono.

En este sentido, para el 2030, la Agencia Internacional de la Energía, prevé que el consumo de hidrógeno verde se multiplique por seis, mientras que la Comisión Europea estima que para el 2050 representará el 10% de la demanda energética de la UE, frente al 2% actual.

El hidrógeno verde es tan versátil que tiene múltiples aplicaciones y puede transformar diversas industrias. En este artículo te contamos sus beneficios y cómo puede aplicarse para impulsar la sostenibilidad.

Definición de hidrógeno verde

El hidrógeno verde es una tecnología basada en la generación de hidrógeno, un combustible ligero y muy reactivo.

El hidrógeno verde se obtiene a través de un proceso químico conocido como electrólisis, que utiliza electricidad para separar las moléculas de agua (H2O) en oxígeno (O2) e hidrógeno (H2).

Si esa electricidad se obtiene de fuentes renovables como la eólica o solar, la producción de energía se realiza sin emitir dióxido de carbono a la atmósfera.

Es importante distinguir entre el hidrógeno verde y otras variantes obtenidas a partir de hidrocarburos. Si bien estos últimos pueden ser más económicos, su proceso de fabricación libera dióxido de carbono, contribuyendo al calentamiento global.

Según el método de producción, se puede obtener hidrógeno gris (obtenido mediante combustibles fósiles del reformado del metano con vapor); azul (también con combustibles fósiles, pero con captura y almacenamiento del CO2 emitido); negro o marrón (se obtiene a partir del carbón mediante gasificación, es un proceso muy contaminante) y rosa (se obitene mediante electrólisis del agua cuando la electricidad proviene de energía nuclear).

La Agencia Internacional de Energía (AIE) subraya la relevancia de adoptar métodos de producción de hidrógeno verde, ya que podrían ahorrar hasta 830 millones de toneladas anuales de CO2, generadas cuando el hidrógeno se produce mediante combustibles fósiles.

Propiedades del hidrógeno verde

El hidrógeno es el gas más ligero de la tierra, es incoloro, inodoro e insípido, y es el elemento más abundante, constituyendo un 75% del universo. Generalmente se encuentra combinado con otros elementos, como el oxígeno en el agua (H2O), con el carbono y otros elementos en compuestos orgánicos. Por esta razón, se obtiene mediante distintos métodos.

El hidrógeno verde es aquel que se obtiene a partir de energías de fuentes renovables, como la hidráulica, eólica o solar y se destaca por su capacidad de almacenamiento, transporte y transformación en energía, liberando solo agua como subproducto.

Aplicaciones del hidrógeno verde

Ahora, veamos cómo el hidrógeno verde se está aplicando a distintos sectores.

Este recurso ya se ha consolidado como un combustible en países como Estados Unidos, Rusia, China, Francia o Alemania.

Producción de electricidad

Una de las aplicaciones más emocionantes es en la producción de electricidad y agua potable sin emisiones, lo que se logra al hacer reaccionar el hidrógeno y oxígeno en una pila de combustible. Este proceso ha demostrado ser muy útil en misiones espaciales, al proporcionar a las tripulaciones un suministro sostenible de agua y electricidad.

Además, el hidrógeno verde es una solución eficaz para almacenar energía renovable, siendo una gran alternativa a las baterías de gran escala y otros sistemas de almacenamiento.

También se puede utilizar como combustible de calefacción, ya sea mezclado con gas natural o por sí solo, contribuyendo así a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en el ámbito residencial y comercial.

Transporte

El hidrógeno verde también está ganando terreno en el transporte, presentándose como una alternativa limpia a los combustibles fósiles.

Su gran versatilidad permite usarlo en sectores difíciles de descarbonizar, como el transporte pesado, la aviación y el transporte marítimo.

Proyectos innovadores, como Hycarus y Cryoplane, respaldados por la Unión Europea, están explorando la integración del hidrógeno verde en aviones de transporte de pasajeros.

Este hidrógeno se destaca por su capacidad de recarga rápida, superando a la electricidad en este aspecto, proporcionando una mayor flexibilidad y movilidad. Además, como combustible no produce ruido ni vibraciones, siendo ideal para zonas urbanas y el transporte de mercancías sensibles.

Industria

El hidrógeno como tal, se ha utilizado durante décadas en la producción de amoníaco y en la fabricación de acero, pero ahora el hidrógeno verde podría ser una opción mucho más limpia y sostenible que los combustibles fósiles.

Las proyecciones indican que para el año 2050, el uso generalizado del hidrógeno verde en la industria europea podría evitar la emisión de aproximadamente 600 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera.

En el futuro, el hidrógeno verde se posicionará como un actor clave en distintos sectores industriales, como la industria petroquímica, la siderurgia, la industria química, el transporte marítimo, la aviación, el transporte público y transporte por carretera.

Aplicaciones del hidrógeno verde

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Ventajas del hidrógeno verde

Es un combustible limpio y sostenible

La principal ventaja del hidrógeno verde radica en su condición como combustible limpio, marcando un gran avance en la búsqueda de alternativas sostenibles. Al producirse a partir de fuentes renovables, no contribuye a las emisiones de gases de efecto invernadero.

Además es más eficiente en comparación a las fuentes que provienen de combustibles fósiles, ya que necesita menos masa de hidrógeno para realizar el mismo trabajo. Su poder calorífico, tres veces superior al de fuentes convencionales, da cuenta de su capacidad para desempeñar un papel crucial en distintas aplicaciones.

Tiene un gran potencial para descarbonizar la economía

En línea con el punto anterior, la capacidad del hidrógeno verde para descarbonizar la economía es evidente. Al integrarse en una variedad de sectores, desde la generación de electricidad hasta el transporte y otras industrias, desempeñará un papel crucial en la reducción de emisiones globales de carbono.

La relación del hidrógeno con la industria viene desde hace años, siendo utilizado como combustible desde principios del siglo XIX para autos y naves espaciales.

En el contexto actual, con la necesidad de descarbonizar la economía mundial, el hidrógeno verde tendrá cada vez más protagonismo. Si su producción se vuelve más económica para el 2030, tal como pronostica el Consejo Mundial del Hidrógeno, estaremos ante uno de los combustibles del futuro.

Puede ayudar a reducir la contaminación atmosférica

La adopción del hidrógeno verde no solo tiene beneficios a nivel global, sino que puede mejorar la calidad del aire y suelos a nivel local, reduciendo las emisiones de gases contaminantes asociados a la quema de combustibles fósiles.

El hidrógeno verde no emite gases contaminantes durante la combustión ni durante el proceso de producción, lo que contribuye a crear entornos urbanos más saludables.

Cómo se produce en Argentina

En esta búsqueda de soluciones más amigables con el medio ambiente, Argentina está emergiendo como actor importante en Sudamérica, capitalizando sus condiciones, ideales para la producción de hidrógeno verde. En este contexto, nuestro país está abriéndose paso con proyectos ambiciosos que prometen transformar la producción de este combustible.

Regiones donde se desarrolla y empresas que lo financian

En la Cuenca Golfo San Jorge, a 20 kilómetros de Comodoro Rivadavia, Chubut, la empresa Hychico, perteneciente a Capsa, ha liderado la producción de hidrógeno verde desde principios de siglo. Su planta cuenta con generación eólica y dos hidrolizadores, destacándose como la empresa que ha desarrollado el primer reservorio natural de hidrógeno a 800 metros de profundidad, que carga a través de un hidrogenoducto de polímero.

Uno de los proyectos más ambiciosos es el liderado por la firma australiana Fortescue Future, en la provincia de Río Negro. En el 2021, la empresa acordó invertir 8400 millones de dólares para instalar una planta de hidrógeno verde en la localidad de Sierra Grande, con una capacidad de producción de 2,2 millones de toneladas anuales.

A principios del 2023 la compañía anunció que se encontraba a la espera de la sanción de una ley para darle estabilidad al sector. En octubre del mismo año, la Legislatura de Río Negro aprobó los contratos celebrados entre las empresas Eólica Rionegrina S.A. y Argentina Fortescue Future Industries S.A. para la cesión de los derechos de uso de tierras fiscales y activos para avanzar en la instalación de un parque eólico en Cerro Policía. La construcción se espera que se inicie para fines del 2025.

En otro orden de ideas, un proyecto impulsado por YPF en colaboración con el CONICET, comenzó a desarrollar un electrolizador de alta potencia para la producción de hidrógeno verde. Será el primer electrolizador producido en Argentina que generará hidrógeno a escala industrial (200 Nm3/h de hidrógeno) a una presión de 10 bar.

Con una inversión estatal inicial de 150 millones de pesos, este proyecto contribuirá a la descarbonización de la industria siderúrgica.

Además, se han anunciado proyectos de hidrógeno verde en Jujuy y Tierra del Fuego, donde la firma MMEx Resources planea invertir 500 millones de dólares para producir 55 toneladas diarias, consolidando la posición de Argentina como un actor importante en la transición hacia energías más limpias.

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